Plazos y claves en el procedimiento de inspección de Hacienda

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Para empresas y contribuyentes, la duración de una inspección de Hacienda es un tema que genera preocupación, especialmente cuando se requiere presentar una gran cantidad de documentación. En términos generales, el plazo estándar de la inspección es de 18 meses, aunque existen excepciones y circunstancias que pueden extender este periodo hasta 27 meses o incluso más.

En este artículo de J. Barber + Asociados, desglosamos los plazos clave de una inspección, las posibles ampliaciones y las estrategias para gestionar cada etapa del proceso de forma eficaz.

Plazo estándar de 18 meses

El plazo general de una inspección de Hacienda es de 18 meses a partir de la fecha en que el contribuyente recibe la notificación formal del inicio de la inspección. Este plazo está diseñado para que Hacienda cierre el procedimiento en un máximo de 18 meses, independientemente de la rapidez con la que obtenga los datos y documentación requeridos.

Por ejemplo, si la notificación de inicio de inspección se emite el 1 de marzo de 2024, el plazo máximo para la resolución sería el 1 de septiembre de 2025.

Notificación de la inspección

La notificación puede realizarse en formato físico o electrónico, y cada uno tiene implicaciones diferentes. Si es física, Hacienda necesita haber intentado su entrega dentro del plazo para que sea válida, incluso si no se recibe personalmente. En cambio, para notificaciones electrónicas, basta con que se haya puesto a disposición en el buzón electrónico del contribuyente.

Plazo ampliado: 27 meses en casos complejos

En situaciones más complejas, el plazo se extiende a 27 meses. Esto ocurre en empresas con estructuras más grandes, como:

  • Empresas con una facturación anual igual o superior a 5.700.000 euros.
  • Empresas que formen parte de un grupo de consolidación fiscal o de un grupo de entidades de IVA que también esté siendo inspeccionado.

Este plazo extendido permite a Hacienda llevar a cabo una inspección exhaustiva debido al mayor volumen de información y la complejidad de estas estructuras.

Factores que pueden extender el plazo de la inspección

Existen otros elementos que pueden ampliar el tiempo de inspección, entre ellos:

Suspensión del procedimiento
Si el caso es remitido al Ministerio Fiscal o surge un conflicto en la interpretación de la normativa, el procedimiento puede suspenderse temporalmente. Durante la suspensión, el tiempo no corre y se reanuda una vez que se levanta la suspensión.

Días de cortesía para el contribuyente
El contribuyente tiene derecho a solicitar hasta 60 días de cortesía, en los cuales Hacienda detiene las actuaciones de inspección. Esto puede ser útil para que el contribuyente organice la documentación necesaria o consulte con sus asesores. Estos días se suman al plazo original de la inspección.

Aportación tardía de documentos
Si el contribuyente presenta documentación importante después de los primeros nueve meses desde el inicio de la inspección, Hacienda podría añadir hasta tres meses más al plazo inicial. Este plazo se amplía a seis meses si los documentos se aportan después de que se emita el acta.

Recomendaciones para una gestión eficaz de la inspección

Desde J. Barber + Asociados, con amplia experiencia en la asesoría fiscal, recomendamos los siguientes pasos para optimizar el proceso de inspección:

  1. Mantener una comunicación clara y eficiente con Hacienda
    Responder con rapidez y precisión a los requerimientos de Hacienda puede evitar retrasos y ayuda a que el proceso se mantenga dentro de los plazos establecidos.
  2. Tener un expediente documental bien organizado
    Contar con toda la documentación contable y fiscal en orden facilita su presentación sin demoras y permite una mejor gestión de la inspección.
  3. Buscar asesoramiento especializado
    En J. Barber + Asociados, analizamos la situación de cada cliente, preparamos la documentación necesaria y gestionamos los plazos y posibles ampliaciones. Un equipo profesional puede ayudar a mitigar riesgos y actuar en representación del cliente para que la inspección no interfiera en la operativa de la empresa.

Entender y anticiparse a los plazos y particularidades de una inspección de Hacienda es fundamental para cumplir con los requisitos fiscales de manera efectiva. Con planificación y un asesoramiento adecuado, es posible gestionar cada fase de la inspección y reducir el riesgo de sanciones o complicaciones.

En J. Barber + Asociados, estamos preparados para ayudarle en cada paso de su inspección tributaria, con la confianza de que sus derechos y obligaciones estarán en manos de expertos fiscales. ¡No dude en ponerse en contacto con nosotros para obtener un asesoramiento profesional y personalizado!